.
Soy la vela que dejasteis por poner
que al verla diminuta y usada
ya no sirve de festín ni adorno.
Y yo misma tan inválida aceptaría el crematorio,
no hay velorio ni casamiento para tan cruel pena,
y verme sola
¡azote del tiempo!
¿no vas a dejar que nadie me ame?
antaña,
pretérito,
sin nadie
sin compañero.
Achaques de sirena derretida ,
candela vieja con fruto de ascuas,
solo retales de un tiempo de luz,
y ni una nota más sonó.
¡azote del tiempo!
no vas a dejar que nadie me ame.
.
Pero algún día se hará a la mar, seguro.
ResponderEliminar"Y yo misma tan inválida aceptaría el crematorio"
ResponderEliminarmil veces preferido al ritual funerario tan hipócrita y tan arraigado en España
el tan palpable azote del tiempo.
ResponderEliminarEl tiempo desgraciadamente no perdona.
ResponderEliminarSALU2